Epílogo-Four months later…

Aún no me creo que esté escribiendo, como lo hacía hace unos meses, y que me haga tan feliz como me hacía por entonces. No he vuelvo para quedarme, pero sí para haceros balance de mi situación. No soy la misma que escribió aquel último post en Londres…

 

Como novedad más importante deciros que me encuentro en Madrid, compartiendo piso con dos amigas y viviendo, en poco tiempo, más que en todo el verano. Y hablando de verano, este año sólo sirvió para ponerme tan morena como de costumbre y para no hacer absolutamente nada. No ha sido el mejor de mi vida, pero sí sirvió para aclarar muchas cosas.

Sirvió para terminar de descubrir qué tipo de persona soy, cuál es la que quiero ser y cuáles son mis objetivos. Pero también sirvió para recapacitar sobre mi presente, mi pasado y el futuro que me espera. Me mudé de un día a otro sin ser muy consciente de ello, y aquí estoy casi un mes después descubriéndome plena y hasta arriba de trabajo, planes, nuevas caras…Al fin y al cabo de eso se trata, de descubrir. Y en ello estoy.

Con Laura, una de mis amigas au pair.

Me admitieron en un máster de radio justo cuando más lo necesitaba. Recién llegada de Londres, la idea de mudarme de nuevo se me hacía extraña pero…cuando me fijo un objetivo no hay nada que pueda pararme. ¿Virtud? ¿Defecto? No estoy segura, solo sé que en dos días había cambiado de ciudad, de ambiente, de vida…Me había fijado un objetivo claro y este era el camino para, por lo menos, intentar alcanzarlo.

Me había encontrado de nuevo en la Universidad, con unos compañeros encantadores y aprendiendo literalmente cada una de las horas que paso entre esas paredes. Me había topado con sorpresas inesperadas, con que el destino es caprichoso pero que los caprichos a veces te hacen sentir tan bien… Me había encontrado con que las amigas de verdad son las que te vuelves a encontrar y parece que nunca se fueron de tu lado. Las que lloran de la risa contigo. Las que te quieren tal y como eres, sin condiciones. También que amistades que se forjaron lejos siguen ahí, ya sea en persona ya sea al otro lado del teléfono.

Con Bea, amiga au pair y vecina en Londres.

Mi rutina es bien distinta a la que viví en Inglaterra, y evidentemente estoy viviendo en mi país pero…se me hace que Sevilla está tan lejos…Parece que me he vuelto a ir a otro mundo. Me he hecho a la ciudad muy rápido y me encanta, aquí nunca se duerme, nunca se para, nunca se tiene tiempo para pensar demasiado…No se me hace complicado vivir en un sitio así.

Con respecto a M y Z, a mi familia londinense…¿qué deciros? No exageraba nada cuando os decía que nos habíamos convertido en uña y carne. No han parado de escribirme y querer saber de mí en todo este tiempo. Hasta el punto de que este verano nos vimos en Barcelona. Increíble. Volver a verlos fue tan raro pero tan especial…volver a abrazar a M y a Z que ya forman parte de mí, de mi historia y de mis recuerdos.

De eso está hecha la vida según me he dado cuenta ahora. De las personas con las que te cruzas, las que siempre han estado ahí y las que se topan en tu camino para desordenar todo. Está hecha de momentos que sabes que jamás se te borrarán de la cabeza, pase lo que pase. Está hecha de caer al fondo y ser capaz de salir a la superficie con algún que otro rasguño, pero sintiéndote fuerte. Está hecha de ganas de vivirla. Y de eso no me falta.

Y con respecto a todos los que seguís preguntándome, los que os encamináis a la aventura de ser au pairs y los que no sabéis qué va a llegar después…Vivid, vivid mucho. Agotad todas las posibilidades que se os presenten. Perseguid justo aquello que más deseáis. No es un tópico. A veces lo sabemos pero lo ignoramos. Perseguid, y como dije alguna vez permitiros rozar los sueños, como estoy haciendo yo.

Trátame bien Madrid porque presiento que este va a ser un año inolvidable.

Bye!

Sel